En un acto de reivindicación gastronómica, el Restaurante Casablanca ha decidido rescatar el pulpo a la gallega, una delicia originalmente leonesa que, con el tiempo, fue reclamada por nuestros vecinos gallegos. Esto es algo que no muchos leoneses conocían, pero es algo que el propio restaurante quiere hacernos ver. Marcando territorio con sabor y orgullo leonés, Casablanca presenta el «Pulpo a la Leonesa», una variante exquisita que redefine los límites de la tradición.

Esta reinterpretación del clásico plato incluye los auténticos cachelos, pero con un giro distintivo: la adición de cecina leonesa y parmesano. Cada tentáculo se convierte en una expresión de la riqueza leonesa, desafiando la narrativa establecida y devolviendo al pulpo a sus raíces leonesas.

El restaurante no se detiene ahí en su cruzada por la identidad gastronómica. Su carta de desayunos incluye una variante del icónico serranito andaluz, ahora con pimientos del Fresno y cecina, llamado ‘Serranito Leonés‘. Esta combinación única refleja la diversidad y la riqueza de la tradición culinaria leonesa, redefiniendo los estándares de la cocina regional.

Pero la audacia de Casablanca no se limita a la conquista de sabores locales. También dirige su mirada hacia la capital española, Madrid, desafiando su famoso bocadillo de calamares. Con un toque especial de alioli negro y un toque de limón, Casablanca ha elevado este plato clásico a nuevas alturas, marcando su posición no solo en la gastronomía leonesa, sino también en la competencia nacional. Para disfrutar este ‘Bocata de Calamares Leonés’, también hay que visitar el restaurante por la mañana, donde podremos deleitarnos con una de las mejores cartas de desayunos de toda España seguramente.